Gastos a considerar en una remodelación.
Uno de los bienes más apreciados es la vivienda. Bajo un techo es donde crece la familia, se conviven con amigos, se encuentra la tranquilidad y la privacidad. Sin importar si es nueva o usada, casa 0 departamento, llega el momento que exigen el mismo cariño que nos dan. ¿Cómo es esto? Con pintura, focos nuevos, un baño de mejor diseño, recámaras amplias, piso de distinto estilo, etc, etc. La remodelación de una casa mantendrá ese sentido de comodidad y ayudará a que su valuación se mantenga a través de los años. Si crees que ya es momento de darle una actualización al hogar, comienza consideran estas categorías de gastos y armar tu presupuesto.
Costos de materiales.
Este es el concepto más grande que puedes considerar en una remodelación ya que no solo depende de la cantidad de materiales sino también de la calidad de los mimos. Los costos que debes tener en mente son los de la construcción (cemento, varillas, ladrillos, etc.) y los acabado (azulejos, pintura, chapas, etc.). Si quieres darte una idea de costos, te recomendamos des una vuelta por Home Depot, Sodimac o tu ferreteria más cercana.
Costos de mano de obra
Los materiales no se ponen solos. Por tanto, necesitas gente con experiencia acorde a tu necesidad. Normalmente, será un albañil pero también pudiera ser que un eléctrico, un plomero o alguien especializado en el uso de cierto tipo de materiales (como con el vidrio).
Diseño de proyecto.
Si el proyecto es pequeño, como la habilitación de una recámara, puede ser que mano de obra y materiales sea lo único a considerar. Si el proyecto es amplio o complejo, es mejor que consigas a un arquitecto o contratista experimentado que te ayude a determinar profesionalment. Aunque esta decisión incrementará tu presupuesto, te ahorrará gastos innecesarios a futuro.
Permisos.
Este punto es poco común que se mencione ya que la mayoría de las remodelaciones se dan en interiores. Pero, si son en exteriores y que notablemente modifican la estructura del inmueble, es posible que te pidan un permiso de construcción. Asesórate con un experto sobre esto para evitar multas.
Financiamiento.
La mejor forma de financiar una remodelación es con ahorros pero si son insuficientes, es mejor usar un crédito para no postergar la decisión. Aunque consideres que puedes ahorrar lo necesario en un mediano o largo plazo, también toma en cuenta que los materiales y mano de obra suben sus precios constantemente.